Hola amigos...
Se que la siguiente entrada va a entristecer a muchos de mis amigos bloggeros, y que no tiene nada que ver con la temática del mismo.... pero dentro de mi interior siento la necesidad de hacerlo, y aprovechando mi rinconcito de la red y principalmente de necesidad de depuración interna y como homenaje a una gran mujer, con todo el dolor mi corazón voy a dedicarle unas palabras desde el interior de mi corazón.... una especie de carta abierta en la cual voy a intentar agradecer en primer lugar a Dios, por la madre que me ha dado, y en segundo lugar a ella misma, por haber dado su vida por nosotros...
Estos están siendo los días más difíciles de mi vida... y es que han sido muchos meses..., siete, nada más y nada menos que siete meses metidos en un hospital entre cuatro paredes... pero eso no es lo peor... lo peor es ver a una persona que entró llena de vida, con muchas ganas de vivir, sin ninguna enfermedad que pudiese considerarse como grave y ver como tal cúmulo de desgracias que sufrió la pobre han terminado con ella...
Pero estoy muy orgulloso... como ha luchado la pobre... qué cantidad de obstáculos ha ido saltando durante este periodo de tiempo... que ganas por vivir... por seguir con los suyos... por su amor a la vida y a los amigos y familia... Yo no hubiese aguantado ni la mitad del tiempo la cantidad de desgracias que ella aguantó.... operaciones, caídas, pruebas, más operaciones.... No la vi echar ni una sola lágrima ni una sola queja en todo este tiempo, y todo porque los que estábamos a su alrededor no nos sintiésemos mal y pensásemos que ella iba a dejar de luchar....
Pero todo ser humano tiene un límite... y el suyo fue alcanzado el pasado sábado de madrugada... y nos dejó como fue toda su vida... tranquilamente, sin ningún aspaviento, durmiendo profundamente...
Muchas gracias por todo lo que nos has dado madre... muchas gracias por hacerlos las personas que somos... Muchas gracias por sacar una familia adelante, viuda desde hace 35 años y hacer que nunca nos faltase de nada tanto a mi hermana como a mi... Nunca, repito, nunca, podré agradecerte lo suficiente todos tus esfuerzos...
Muchas gracias por todo madre... y ojalá desde donde estés veles por nosotros y te sientas orgullosa de nosotros... y como me comentó en su día una vez... "Llegado el momento no lloreis porque me haya ido, sino alegraros de haberme conocido".
Te quiero muchísimo...
